En mayo, la actividad manufacturera de las pymes argentinas cayó un 19% anual, acumulando una retracción del 19,1% en los primeros cinco meses del año respecto al mismo período de 2023, según la CAME. La situación refleja un deterioro financiero y una debilitación en la demanda.
Por esta razón, las industrias pymes esperan que el gobierno nacional establezca una reducción de impuestos, que representa el 33,9% de las respuestas, seguida por el estímulo a la demanda interna con un 14,7%. Como también, la adecuación de las relaciones laborales.
Los resultados surgieron del Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) que elabora CAME, con una muestra que alcanzó a 414 industrias pyme a nivel federal, en donde explican que la mayor dificultad son la falta de ventas, representando el 45,1% de las respuestas, y los altos costos de producción y logística, que constituyen el 32,8%.
Los seis sectores manufactureros del segmento pyme tuvieron fuertes declives en la comparación anual, siendo los más afectados “Papel e Impresiones” (-45,8%) y “Químicos y plásticos” (-23,9%). “Textil e indumentaria”, que venía siendo casi el único ramo en aumento hasta abril, se retrajo 4,3% anual en mayo.
El sector de alimentos y bebidas registró una caída de 14,7% anual a precios constantes en mayo y una mejora de 2% en la comparación mensual. Para los primeros cinco meses del año acumula una baja de 15,8% anual. Las industrias operaron con 72,4% de su capacidad instalada en el quinto mes del año.