Después de celebrar , cerca de las 4 AM ocurrieron incidentes entre los pocos hinchas que quedaban en el Obelisco y la Policía de la Ciudad. Como resultado de la violencia, 13 agentes sufrieron heridas leves y seis personas fueron detenidas.
Los enfrentamientos tiñeron una jornada marcada por la histórica victoria argentina, que consiguió el bicampeonato de la Copa América después de vencer por 1-0 a Colombia en la final que se disputó en el Hard Rock Stadium, en la ciudad de Miami, en el sur de la costa de Florida, Estados Unidos.
Con la presencia de dos carros hidrantes, varias motos y agentes a pie, los efectivos policiales poco a poco dispersaron a los manifestantes. Sin embargo, algunos de los hinchas hicieron frente a la Policía y arrojaron todo tipo de objetos contundentes hacia los uniformados que avanzaron por las distintas arterias que rodean al Obelisco y por donde los manifestantes escaparon.
Hubo algunas corridas, quema de objetos, humos y mucha agua desparramada en la calle por efecto del avance del camión hidrante. La Policía rodeó la Plaza de la República y avanzó hacia el sur, el norte de la 9 de Julio para dispersar a los simpatizantes.
Los policías contuvieron la situación durante varios minutos, pero la agresión continuó. Finalmente, la desconcentración se realizó por la avenida 9 de Julio en sentido hacia Constitución, y por Corrientes en sentido a la avenida Callao.
Tras el despeje de la zona, las autoridades porteñas constataron que 13 policías resultaron heridos –uno de ellos con una herida cortante profunda en una pierna y otro con traumatismo de muñeca-, mientras seis personas -5 hombres y una mujer- fueron detenidas por producir desmanes en las inmediaciones del monumento ubicado sobre la avenida 9 de Julio.
Fuentes policiales señalaron que la mayoría de las aprehensiones se realizaron por resistencia a la autoridad y daños.
También durante los incidentes, dos motos, una de ellas de Tránsito, y varios contenedores de basura fueron incendiados.
Los violentos incendiaron contenedores de basura y destrozaron vidrieras de comercios ubicados en las inmediaciones del Obelisco porteño. (Jaime Olivos)
En medio de la celebración de los hinchas, muchos violentos aprovecharon para robar comercios y destrozar vidrieras. Uno de los negocios afectados fue el emblemático bar La Giralda, ubicado sobre avenida Corrientes al 1400, que terminó vidrios rotos luego de que delincuentes las rompieran para llevarse botellas de whisky añejas y otros objetos históricos.
“Teníamos unas botellas de whisky antiguas, de lo que era La Giralda de los años 30, tazas antiguas originales de la casa, el reconocimiento del Gobierno de la Ciudad por ser un bar notable, y un montón de cosas que eran reliquias de la casa. Y se llevaron todo”, lamentó hoy a la mañana Ariel, encargado del local gastronómico.
Si bien reconoció que ya no podrán recuperar lo perdido, el trabajador adelantó que revisará las cámaras de seguridad instaladas en el interior del bar para entender cómo ocurrieron los destrozos. “Estoy tratando de conseguir un vidriero para que por lo menos me ponga el vidrio. Recién llegamos y me encontré con esto, ahora estamos limpiando”, explicó.
En la investigación de los incidentes interviene la Unidad de Flagrancia Este, a cargo del doctor Mariano Camblong, quien dispuso actuaciones por averiguación de ilícito respecto a las lesiones y daños, y por atentado y resistencia con relación a los detenidos.
Una de las vidrieras rotas del emblemático bar La Giralda, ubicado sobre avenida Corrientes y a pocos metros del Obelisco.