El criminal, con una condena previa por amenazas agravadas en 2016 hacia la víctima y una orden de restricción que le impedía acercarse a su ex pareja, no respetó las medidas de protección establecidas. Esta violación de las disposiciones legales culminó en un desenlace trágico.
Un hombre confesó haber asesinado a su madre en Libertad, partido de Merlo. La Policía Bonaerense encontró el cuerpo de la víctima en su domicilio, con heridas de arma blanca en la espalda y el tórax.
El hecho ocurrió el domingo por la tarde. El hombre, de 36 años y llamado C.P., se encontraba en el puente sobre las vías del tren Sarmiento, en la intersección de las calles Segunda Rivadavia y Casacuberta, en Castelar, partido de Morón.
Al ser avistado por la policía caminando sobre el puente, los efectivos intentaron intervenir, pero C.P. huyó corriendo hacia una avenida cercana. En su intento de escape, fue atropellado por un automóvil que luego se dio a la fuga. Herido y sin posibilidades de escapar, fue asistido por el personal del Comando de Patrullas de Morón, a quienes les confesó que su madre había sido víctima de una muerte violenta.
Más tarde, durante el operativo, C.P. admitió que él mismo había asesinado a su madre. La Policía Bonaerense se dirigió a la residencia de la mujer, de 69 años y llamada Sara Zabala, en la calle Bernasconi al 800, en Libertad. Al llegar, encontraron la puerta abierta, una mancha de sangre y un gran desorden en la casa, con muebles y sillas volcados. La mujer fue hallada muerta en una habitación, presuntamente apuñalada. Se descubrió también que había intentado pedir ayuda a través de su celular, que tenía manchas de sangre.
El caso está siendo investigado por el fiscal Claudio Oviedo de la UFI N°5 de Morón, quien ha calificado el delito como homicidio agravado por el vínculo, que conlleva una pena de prisión perpetua. Oviedo ha ordenado, entre otras medidas, el análisis de las cámaras de seguridad de la zona. C.P. permanece detenido en una comisaría de la Policía Bonaerense, y el fiscal ha solicitado su traslado a un pabellón psiquiátrico para su evaluación.
